Duerme, duerme y sueña a tener, una vida sin la tentación de delirios, de oro y poder, de juzgar, aunque exista razón.
La avaricia es la esclavitud del alma y de la libertad.
Que no te bese nunca la envidia, que no te abracen el odio y el mal.
Duerme, duerme y sueña con ser de tu mejor tesoro el guardián: el amor que yo en ti he volcado, de eso tienes mucho que dar.
No te engrandezcas con la riqueza ni te apoques con la pobreza, que ni la derrota ni el fracaso te impidan ver que mañana otro día será.
Duerme, duerme, aquí estaré, las nubes serán tu colchón, que ni el viento ni la brisa te dejen de acariciar, pues tú eres mi Don.
Duerme, duerme y sueña a tener ...
La avaricia es la esclavitud del alma y de la libertad.
Que no te bese nunca la envidia, que no te abracen el odio y el mal.
Duerme, duerme y sueña con ser de tu mejor tesoro el guardián: el amor que yo en ti he volcado, de eso tienes mucho que dar.
No te engrandezcas con la riqueza ni te apoques con la pobreza, que ni la derrota ni el fracaso te impidan ver que mañana otro día será.
Duerme, duerme, aquí estaré, las nubes serán tu colchón, que ni el viento ni la brisa te dejen de acariciar, pues tú eres mi Don.
Duerme, duerme y sueña a tener ...